martes, 17 de enero de 2012


Siempre hay un momento en que el camino se bifurca, cada uno toma una dirección pensando que al final los  caminos se volverán a unir. Desde tu camino ves a la otra persona cada vez más pequeña. "No pasa nada, estamos hechos el uno para el otro, al final estará él". Pero al final solo ocurre una cosa... llega el puto invierno.
No hay vuelta atrás, lo sientes, y justo entonces intentas recordar en que momento comenzó todo y descubres que todo empezó antes de lo que pensabas... Mucho antes.
Y es ahí, justo en ese momento, cuando te das cuenta de que las cosas solo ocurren una vez. Y por mucho que te esfuerces, ya nunca volverás a sentir lo mismo.
Ya nunca tendrás la sensación de estar a tres metros sobre el cielo.